Anónimo Anónimo R. G. era un escritor bastante mediocre pero se había labrado una carrera espléndida; Recojía con orgullo y sin modestia alguna premios a trabajos que llevaban su firma.
"El lazarillo de Tormes" "El flautista de hamelín" "Las mil y una noches" "El poema del mio cid" y otras tantas fueron reconocidas como obras cumbre de la literatura y no tuvieron mas remedio que homenajear a Anónimo puesto que nadie pudo negar que todas llevaban su firma. Tristemente, lo que el escribía en realidad no lo había leido nadie. Pero no le importaba. La fama era suficiente para el. Hasta que un día una pintada amenazante en casa de un importante político truncó su carrera. Anónimo negó que fuera obra suya, a lo que se le comentó que firmada por él estaba. Tuvo que huir y renegar de la fama. En el registro cambió su nombre para evitar más malentendidos. Ahora se llama Refranero Popular. Nadie ha leido nunca nada suyo. d.c.r.
¶ 8:10 p. m.
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D.C.R. :
Ha decidido que la vida es más trágica sin caperucitas ni lobos y pretende perderse de nuevo en el bosque a robar cestas a desorientadas niñas, o niñas a confiadas cestas.